Kevin Mancojo

Diario de a bordo

La magia de la simpleza

6 comentarios

Hoy estaba editando un vídeo, pero no estaba muy inspirado. Con cualquier cosa me estaba distrayendo. Encima me apetecía probar mi nuevo patín motorizado (en el canal de Youtube lo tenéis si queréis verlo). Sí, motorizado, tiene un motor que se carga y ¡hala! A correr. Y lo quería probar, pero con mi perra. Decidí coger ambas cosas y dar una vuelta.

Llevaba tiempo sin disfrutar tanto me parece a mí, porque mientras íbamos hacia un descampado inmenso me estaba sintiendo más feliz que un niño pequeño.

Toda aquella zona es preciosa cuando está llena de flores; ves un terreno gigante inmerso de un color amarillo fuerte, eso, combinado con el cielo azul despejado se crea algo bello.

Snapchat-3516527547860451982

Hoy estaba así y es una zona preciosa para pasear con tu perro para que se sienta a gusto y pueda corretear por ahí libremente sin molestar a nadie.

Ya he ido en varias ocasiones, pero nunca ha sido tan mágico como en esta ocasión. El primer momento en el que empecé a asombrarme de que algo tan simple pudiera crear tanta magia fue cuando quise echar una foto a la perra y al patín:

IMG_20151106_154344

He de admitir que la muy perra (chiste malo, lo sé) sabe posar, siempre termina saliendo bien. Pero aun así, transmite mucho esa imagen y si llegáis a estar allí, sin apenas ruido, disfrutando de la brisa y del paisaje…

Sin embargo, lo que nos ha llegado a cautivar tanto a Lila (así se llama mi perra) como a mí han sido las cabras (u ovejas, no sé diferenciarlas, lo siento). Estábamos en un camino de tierra y al terminarlo vimos esto:

2015-11-06 15.59.01

No me preguntéis porqué, pero nos hemos tirado los dos embobados unos 10-15 minutos. Supongo que el ver como todas pastaban, las aves que se posaban en el lomo de algunas cabras, además de sus graznidos, el sonido de como arrancaban la hierba todas juntas, algunas que estaban tan solo a unos metros de nosotros… todo eso me tuvo allí quieto un buen rato observando y disfrutando. Creo que la curiosidad que tenemos mi perra y yo (va en serio, ella es más curiosa que yo y todo) nos ancló allí para ver cómo funcionaba aquel espectáculo.

Sí, siempre se ha visto algo así, pero desde el coche o a distancia, pero vivirlo tan cerca… Puede sonar raro, pero todo aquello me transmitió magia. Imagino que la propia naturaleza es mágica si la sabes observar y sentir y yo hoy lo hice.

6 pensamientos en “La magia de la simpleza

  1. Son ovejas, seguramente también haya alguna cabra pero la mayoría al menos lo que se ve en la foto son ovejas. Saludos Kevin y disfruta del patin y de Lila.

  2. Que buenos y que reconfortantes son esos paseos por el campo. El silencio, la brisa y ese colorido tan hermoso en esta época del año. Hay que ver lo poco que cuesta en esta vida disfrutar de buenos momentos, verdad. Me ha encantado el título de la entrada, porque verdaderamente es en lo más simple dónde comienza la magia. Un saludo y a seguir disfrutando de esos momentos!!! 🙂

Deja un comentario