Kevin Mancojo

Diario de a bordo


12 comentarios

Mi logo

Hace tiempo que un amigo mío y yo nos pusimos a hablar sobre el tema de la portada para el canal de Youtube (mis dibujos no están mal, pero hay imágenes mejores), él se dedica a hacer este tipo de cosas y se ofreció para ayudarme con ello.

Y hace poco me vino la inspiración para una especie de logo y rápidamente le hice un boceto. Hoy me ha mandado una foto que me ha encantado. Hemos ido retocando cosas, metiendo ideas nuevas y al final ha quedado como más me ha gustado. Pero a pesar de todo, suelo preguntar por la opinión de los demás y algo que me gustaría que hicieráis es dejar en los comentarios lo primero que os sugiere el logo, y si es posible, en una sola palabra.

LogoKevinMancojo_SinFondo

Quería que la imagen recogiera cosas de mí y creo que es justo lo que hemos logrado al final: la sonrisa, que es algo que me caracteriza, el tema de las manos por lo de manco, pero que a su vez hacen el gesto de que todo va bien (algo muy importante) y el avión, que se debe a mis ganas de viajar y de conseguirlo de vez en cuando.

La verdad es que desde el primero que me hizo ya me sentí muy satisfecho, imagino que es porque esto se convierte en algo tuyo, en algo que te indentifica y yo nunca tuve algo como esto. Es mi primer logo y si todo sale bien, tendremos otro reservado para otras cosas.

Espero que os guste porque, sinceramente, la imaginación de mi amigo me ha sorprendido muchísimo cuando he visto esto con cuatro cositas de nada y que en realidad son muy importantes. ¡Mil gracias por hacerme esta chulada de logo!

Y ya sabéis… Nunca dejéis de sonreír.


5 comentarios

Vídeo informativo

Sé que generalmente no nos pasamos por todos los post que escribimos, ya sea por tiempo o porque no atrae el título, así que para aquellos que no puedan leerse todas las entradas que publico, o para los que no les apetece leerse todo, os dejo un resumen que he hecho hoy con un vídeo (como siempre, hay chorradas de por medio).


11 comentarios

El talento

Ayer empecé un curso de coaching. Esta palabra inglesa que se ha puesto tan de moda actualmente es un método para sacar la mejor parte nosotros para poder rendir con la mayor capacidad posible. En realidad tiene diferentes definiciones (la que os he explicado tiene parte de mi propia cosecha), creo que es difícil encontrar dos iguales, pero sí que todas quieren transmitir lo mismo: debemos sacar lo positivo que tenemos en nuestro interior, mentalizarnos a ello y sacarle el mayor jugo posible.

El curso tiene pinta de que me va a gustar porque con el profesor comparto muchas ideas, pero de lo que quería hablar, que fue lo que me llevé del día de ayer, es que tenemos que encontrar nuestro talento.

Una de las cosas que el profesor dijo es que se nos cortan las alas, por así decirlo; tal vez un niño adore dibujar y en vez de apuntarlo a pintura, lo meten a fútbol, cuando el crío no lo disfruta de verdad. Y esto es uno de los miles de ejemplos que hay en este mundo. No sé a ciencia cierta el motivo de porqué se hace esto, pero llegué a la conclusión de que se debe a que nuestros padres quieren que consigamos lo que ellos no pudieron alcanzar. Un error bastante gordo, pero lo hacen con buena fe. Y por supuesto que esto no ocurre en todos los casos, pero sea como sea, sucede…

Y es una pena que el don que tenemos cada uno de nosotros quede cohibido porque a veces incluso resulta complicado descubrir cuál es. Pero una vez que se tiene y se sabe uno puede dedicarle horas. Llega el momento en que si no te avisan otras personas, no te das cuenta de que ha pasado media tarde.

Cuando el profesor habló sobre esto, me di cuenta de que esto me pasa con las charlas (por suerte tengo un buen reloj biológico y manejo las horas bastante bien). Cuando empiezo, no paro. El tiempo se pasa volando y las caras de las personas me indican que aunque pasen dos horas más, no habría problema.

Hoy me ha pasado, hoy tuve otra charla y esta clase era algo más adulta, eran muy receptivos. Llegamos incluso a coger unos 10 minutos de la clase siguiente solo porque yo podía seguir contando cosas y porque ellos podían seguir escuchándome como a niños que les cuentan una historia.

Solo tengo 22 años, no he vivido tantas tragedias ni aventuras como otras personas, pero de un modo u otro logro meter al público en una bola en la que solo estamos ellos y yo, nadie más.

Ese es mi talento, al menos eso creo y quiero seguir este camino por mucho tiempo. Todos tenemos un don, solo hace falta encontrarlo.


15 comentarios

Las cartas de la sonrisa

Tengo más noticias, pero no es sobre el tema de la televisión. Es una pequeña idea que derivé de una idea que me contó una amiga que vio hace tiempo (suena lioso, pero da igual, lo importante viene ahora).

Cuando se me ocurrió quería que fuera a lo grande, es decir, nada de por mi pueblo y ya. No, yo no quiero eso, el objetivo de la idea es muy positivo y creo que puede sacar sonrisas como para que sea algo aislado. Así que, todos los que me lean, que sé que no sois pocos, me gustaría que buscarais la forma de llevar a cabo el plan (me falta la risa malvada y ya sonaría a malo de película).

Yo hablé con el chico de la biblioteca y hoy hablé con la mujer del «Banco del tiempo» porque sé que les gustan estas cosas y podrían ayudarme con ello. Hemos quedado en planearlo y empezar a organizarlo a lo largo de mayo para que en junio se inicie todo el proyecto. Intentaremos que los bares y las tiendas del pueblo nos ayuden para que todo sea más fácil. Además quiero ver si puedo incluir algunos institutos en esto.

La idea es sencilla, no tiene misterio: en unos sobres en los que ponga: «¿Has sonreído hoy?» se meterán cartulinas pequeñas y en ellas se escribirán frases motivadoras y positivas. El sobre se dejará en algún lugar público y aquel que lo encuentre y le llame la atención, leerá la tarjetita que hay dentro y así posiblemente le hayamos alegrado el día.

Habrá muy pocas normas y encima opcionales, me explico: detrás del sobre o en una de las cartulinas se escribirá algo como: «Si quieres puedes escribir otra frase que te haya motivado o que te haya hecho sonreír. Y puedes dejar el sobre en el mismo sitio en el que lo encontraste o en otro lugar público.»

Es algo simple que podría alegrar a alguien mientras desayuna en su bar favorito o tal vez le saque una sonrisa a alguien que va hacia el trabajo.

Como os digo, me gustaría que todos los que me leáis formarais parte de esto e iniciar el proyecto de manera más global. Incluso para los que estáis al otro lado del charco (no me olvido de vosotros).

Y este es el proyecto, «Las cartas de la sonrisa». Espero que os guste y si tenéis alguna pega o alguna idea, serán bienvenidas.

Ya sabéis… Nunca dejéis de sonreír.


16 comentarios

Mi primer casting

El título de la entrada ya dice mucho así que allá voy:

Hace dos días me llamó un profesor que tuve en un par de cursos (el taller de radio y de técnicas de comunicación y expresión). Me contó que ahora estaba metido en asuntos de la tele, en la regional de aquí de Murcia. Y me dijo que estaban preparando un programa nuevo en el que yo podría encajar bastante bien. Yo empecé a flipar a colores, me sentí eufórico y se lo conté a un par de amigos (no muchos porque no sabía lo que vendría después). El profesor me dijo que simplemente tenía que ir al día siguiente a Murcia capital y presentarme allí.

Yo no sé vosotros, pero cuando a mí me dan una oportunidad así dejo de editar vídeos, dejo mi pata chula en casa, me dejo todo y salgo corriendo (bueno, en este caso no podría) para probar suerte.

Al principio me empecé a preocupar porque no sabía cómo narices ir, pero como siempre os digo: todo tiene solución. Llegué allí y el día no acompañaba; estaba todo nublado y parecía que iba a llover, pero a pesar de todo yo estaba histérico y contentísimo por haber llegado.

Entré al edificio con otras dos mujeres que también tuvieron la oportunidad de conocer al hombre que me dio esta oportunidad y acabamos hablando. Ninguno de los tres nos lo creíamos. Ya habíamos estado en la radio cada uno de nosotros, pero la tele… esto ya era otro nivel.

Aunque tengo que admitir, y fue algo que comentamos, que también hace adicto a todo aquel que lo prueba. Al menos esa impresión nos dio cuando nos pusieron delante de la cámara y nos hicieron hablar (de manera individual lógicamente, así funcionan los castings) sobre nosotros mismos. Además teníamos que dar nuestra opinión respecto a unas preguntas que nos hacían sobre asuntos más cotidianos.

Yo antes de pasar por la puerta y sentarme frente a la cámara y las personas allí presentes, estaba nervioso. Nunca hice algo así y no sabía qué me iba a esperar, sin embargo, fue entrar, acomodarme en el sillón y sentirme de un a gusto… Empecé a hablar y a enrollarme como siempre, como en mis charlas, aunque tenía que resumir. Es más, la chica me cortó y pasó a las preguntas. Al final me dijo que no tendría problemas para que me cojan y dio un par de fechas: en la primera nos enseñarán el plató y nos presentarán el presentador (valga la redundancia) y la segunda empezará el programa.

Parece que acabaré saliendo en la 7rm, un canal regional, esto ya es más nivel. Vamos subiendo peldaños, en este caso hemos subido unos cuantos de golpe. A ver si todo sale bien y os traigo historias para contar.

Ya sabéis… Nunca dejéis de sonreír.


7 comentarios

Un vídeo con un mensaje muy potente: el racismo

Hoy no me voy a enrollar, no quiero porque lo que os voy a enseñar ahora merece toda la atención del mundo. Cualquier cosa que yo pudiera escribir al respecto le quitaría la inmensa fuerza que tiene.

Hacía mucho tiempo que no veía algo de este calibre:


11 comentarios

Un poco de amor propio

Últimamente estoy leyendo bastante sobre el amor propio y la inteligencia emocional que le falta a mucha gente, es decir, esa inseguridad que muchos sienten, la falta de cariño, miedo al rechazo por los demás, etc.

Y junto a ese tema yo siempre uso una metáfora, pero primero quiero explicar más o menos el motivo por el que esas personas tienen esos sentimientos y sensaciones: no se aprecian a sí mismos, no se quieren. No ven lo bueno que tienen y buscan que otros se lo digan o se lo demuestren. Necesitan que alguien esté a su lado para sentirse queridos porque de lo contrario, empezarán a sentirse mal. Creen que no valen lo suficiente como para tener amigos o pareja (lo mismo da). Se sienten impotentes, como si fueran un minúsculo granito de arena tratando de hacerse ver frente al planeta Tierra.

Es un pensamiento negativo hacia uno mismo que este tipo de personas se crean y que tratan de solucionar buscando la manera de caer bien a los demás, intentando hacer las cosas de la mejor manera posible y dando de ellos todo y más. Y aquí está el problema, que lo hacen para los que los rodean y no para sí mismos.

Creo que muchos hemos empezado por ese camino (me incluyo), hasta que llega el momento en el que nos damos cuenta que nosotros también tenemos un valor que nos caracteriza. Para llegar a este punto primero hay que pasar por muchos baches, los que nos llevan a sentirnos muy solos, prácticamente aislados. Algunos, llegados a este punto se dan cuenta que el error estaba en apreciar más lo que se hacía por los demás que por uno mismo. Es aquí donde se empieza a cambiar la visión de la vida.

Y ahora viene mi metáfora: desde poco después de aprender esto, pensé que si viéramos a los que nos rodean como complementos de ropa, veríamos que somos capaces de prescindir de estos; todos hemos olvidado alguna vez las gafas de sol, una chaqueta o algún gorro al salir de casa y hemos sobrevivido. Cada uno de los complementos nos aporta algo de manera distinta, pero con ellos nos sentimos mejor y más protegidos.

Dicho de otra forma, a pesar de encontrarnos más a gusto con gente a nuestro alrededor, somos capaces de no depender de los demás, solo tenemos que encontrar la actitud adecuada y creérnoslo. Encima han llegado a nuestras vidas para algo en concreto, para aportar su granito de arena. Eso sí, muchos se irán de nuestro lado (por las buenas o las malas), pero recordad que dejaron una parte de ellos en nosotros, directa o indirectamente.

En mis últimas charlas les he hablado a los chavales de que nadie va a aprobar por ellos, nadie les va a sacar una notaza, nadie va a vivir de lo que estudien, nadie va a ser feliz por ellos. Eso tiene que venir de dentro de cada uno. Necesitan ponerle ganas para llegar a sus objetivos porque los demás no lo harán. Y aunque suene egoísta no lo es, porque si uno tiene amor propio y busca la felicidad en su interior, de una manera u otra lo transmitirá al resto de las personas haciéndolas feliz también.

Ya sabéis lo que digo… nunca dejéis de sonreír.


6 comentarios

Película nº 1: «Focus»

Como prometí ayer, hoy iba a hablar sobre la última película que vi en el cine: «Focus», protagonizada por Will Smith y Margot Robbie.

Os contaré más o menos de lo que va: Nicky (Will Smith), un estafador profesional conoce a una novata, en lo que a la estafa se refiere, llamada Jess (Margot Robbie). Él comienza a enseñarle técnicas y maniobras para robar y engañar. Según va ocurriendo esto, ambos estrechan su vínculo y se enamoran hasta que de repente Nicky decide dejarla. Tres años más tarde él se encuentra en Buenos Aires, donde le surge una gran estafa y se reencuentra también con Jess.

Explicado esto, os daré mi opinión: este tipo de películas suelen acabar igual (no os diré nada para no quitarle la gracia) y la verdad es que terminé acertando. Es lo que me gustó de esta película; al tratarse de estafadores, los engaños eran continuos y yo me calentaba la cabeza pensando qué podía suceder.

La película es entretenida, tiene momentos muy graciosos con los que te puedes echar unas risas. Y algo que me encantó es que lo que plantean sobre las técnicas para engañar son ciertas. Vi unos vídeos y documentales al respecto que me vinieron a la mente cuando surgieron en la película. Puede parecer inverosímil, pero os aseguro que hay gente que logra hacer lo que hace Will Smith o mejor dicho, Nicky.

Pero también tengo que admitir que cuando termina te quedas un poco en plan: «¿Ya está? ¿Se acabó?». No sé si es por la duración (no llega a las dos horas) o porque parece como si no hubiera un objetivo final en concreto, es decir, ¿a dónde querían llegar?

Fui con una amiga a verla y cuando acabó, le pregunté por la hora. Me había parecido corta y bueno, imagino que era por tener un final escaso de chicha. Los he visto mejores en ese sentido.

A pesar de todo, es muy divertida, muy real a pesar de no parecerlo y sirve para pasar una tarde. Aquellos que estén acostumbrados a este tipo de películas les sabrá a poco seguramente (que difícil es intentar ser también objetivo).

Como ya os dije, no soy crítico, pero intento plantear lo que se me viene a la cabeza sobre la película y espero que os haya servido.


2 comentarios

Cine

¡Y a por la nueva categoría! Llevaba tiempo pensando en hacerla y como esto es mío y aquí mando yo, pues la he creado y listo.

Ahora en serio, me encanta el cine a pesar de perderme algunas películas por despistes o pereza (no siempre apetece gastarse tanto dinero, ni siempre me pueden llevar). Eso sí, soy de acción y efectos especiales, aunque adoro las que te calientan tanto la cabeza que al final no sabes ni qué pensar. No soy de dramas, de esos ya tenemos cada día en las noticias o incluso en la casa de al lado. Pero si he llegado a ver algunas románticas. Y las comedias, esas creo que nos gustan a todos. Las de miedo están mucho mejor con amigos en casa y a oscuras o a veces hasta solo.

Las taquilleras (creo que se llaman así las que venden las entradas) ya me conocen y no solo ellas, uno de los que abre la puerta al final de la película para indicarte sutilmente que te largues, es muy amigable y hemos tenido conversaciones sobre películas de «Marvel» (son de mis favoritas). Ya no son simples trabajadores para mí, me alegra ver esas caras cada vez que voy.

No soy un crítico de cine, no soy especialista en esto, solo trataré de dar mi opinión de una manera objetiva y subjetiva para que los que no estén seguros de gastarse un dineral en el cine, decidan si ir o no.

Por lo tanto, a partir de ahora, película que veo, película que tendréis en el blog. Y para mañana ya habrá una para comentar.