#20 Frase de lunes

Hoy, aunque tenga el estómago un poquito mal, la garganta esté irritada y esté de viaje, os dejaré con la frase de lunes. Ya dije que no quería fallar con esto y así seguirá.

«Pregúntate si lo que estás haciendo hoy te acerca al lugar en el que quieres estar mañana.» – Walt Disney

En mis charlas, una de las cosas que suelo decir es que necesitamos objetivos en esta vida; son una fuente de motivación muy importante. Posiblemente sin ellos se nos quitarían las ganas de todo.

Si habéis hablado con personas que viven desganadas, generalmente no tienen metas. En algunos casos ven difícil alcanzarlas o ven demasiados impedimentos para llegar a ellos. Aunque esto último es más bien la actitud que mostramos ante ello. Algunas personas no son capaces de afrontar ciertas situaciones, se agobian con más facilidad, no saben manejar algunas de las cirscunstancias…

Ya hablé en su momento de esto y hoy quiero dejaros claro que aunque todo parezca difícil, siempre debemos dar un paso adelante, tenemos que ir poquito a poco acercándonos a nuestros objetivos, a pesar de poder encontrarse a varios años. Hay algunos que no requieren semanas ni meses, sino años.

Ya me conocéis muchos y creo que sobra decir que yo intento avanzar cada día para llegar a la cima de esa montaña de la que os hablé hace tiempo («La fama y el reconocimiento»). Busco oportunidades por todos lados para crecer otro poco, acepto propuestas que puedan acercarme a mis metas. A veces incluso no me acercan, pero sé que podrá serme útil en un futuro para que logre lo que quiero.

Yo solo sé que si sigo así llegaré a conseguir mis objetivos porque lo que hago hoy, me acercará al mañana que yo quiero.

#19 Frase de lunes

Volvemos a empezar otra semana más. Yo la he empezado dando una vuelta con mi perra en el patín, lo echaba en falta. Y ahora toca dejaros una frasecita que acabo de encontrar y que resulta muy interesante:

«El destino mezcla las cartas, y nosotros las jugamos.» – Arthur Schopenhauer

Este tema es tan subjetivo… hay quién cree en el destino, hay quién cree en las casualidades y otros en las causalidades, hay miles de ideas y reflexiones sobre esto y muchas dudas al respecto.

La mía ya os la expliqué en su momento (¿Destino o casualidad?). No quiero centrarme en mi opinión, sino en el efecto de la misma; he cogido muchas cartas y he tenido buenas y malas, pero las he tenido que jugar todas. Generalmente intento echar las mejores en la mesa buscando la mínima oportunidad, a veces me las reservo para salir de algún apuro. Todo puede servir aunque no lo parezca, incluso a veces las malas jugadas llevan a una buena. Hay que insistir y tener paciencia porque nunca se sabe cuándo puede tocarte el joker…

Semana y media en Madrid

En la última frase de lunes os comenté por encima algo de un taller… Bien, pues eso, rellené la solicitud y me aceptaron. Es de tecnología e investigación, será en Madrid y durará más o menos una semana y unos pocos días. Por suerte, la fundación en la que estoy metido me paga el viaje (sigo teniendo pendiente esa entrada para hablaros de ella).

Siempre fui a la capital en plan guiri, observando todo: las calles, los edificios, los monumentos, etc. Soy de esos que visita otro lugar y se emboba cada dos por tres, como si nunca jamás hubiera salido de mi pueblo y todo lo demás resultara algo futurista. Supongo que es lo que hacemos los que adoramos viajar, valorar cada detalle.

Pero en esta ocasión no voy en ese plan, esta vez toca fijarme a un horario y crear una pequeña rutina. Es algo que quería. Los que me seguís desde hace tiempo sabéis que necesito eso que llamo reseteo y empezar de cero. Esto podría ser una primera toma de contacto para mí y ver cómo me desenvuelvo en un lugar diferente. Siendo Madrid dudo que tenga problemas, ya la he visitado bastante. Sin embargo tengo una pega, no me aclaro a la perfección con el metro y el cercanías. Un punto más a favor para ir y terminar de comprender todas esas líneas y números que se mezclan como ecuaciones.

Estoy ansioso y he de admitir que también un poquito nervioso, pero es más por el hecho de ser una novedad y ser lo que buscaba, esa inquietud que se tiene cuando sabes que están a punto de comprarte ese juguete que tanto te gusta. Eso sí, a los pocos días ya se desvanece y estás más tranquilo.

Siempre os digo que tenéis que hacer lo que os guste, que debéis salir de la zona de confort, probar cosas nuevas, cometer alguna que otra locura (con cuidado), conocer lugares y personas diferentes, abriros al mundo… Y si yo os lo digo, tendré que cumplirlo yo también, ¿no? Pues allá voy, a por otra aventura más de las mías, aunque esta sea con diferencia la más diferente de todas.

PD: Espero poder traeros vídeos para compartir un poquito esa experiencia nueva con vosotros.

Película nº 4: «Del revés (Inside out)»

Llevaba tiempo queriendo hablaros de una pedazo de película (al menos para mí), «Del revés (Inside out)». La vi hace ya tiempo, cuando el cine de verano todavía estaba abierto, pero como os dije, entre unas cosas y otras no había forma de ponerme con esto.

Como siempre, dejo un pequeño resumen por si alguien no sabe nada de esta película:

Riley es una niña que tiene que mudarse a San Francisco porque su padre ha encontrado un trabajo nuevo allí. Durante todo este proceso, comienzan a cobrar protagonismo las emociones que se encuentran en su cabeza, en concreto en el Cuartel General: Ira, Miedo, Alegría, Asco y Miedo (en orden de la imagen). Pero de repente cae el caos sobre ellos debido a los cambios que se producen en la vida de Riley, y aunque Alegría intenta mantener la calma y tener una actitud positiva, las demás emociones no son capaces.

Yo no sé a vosotros, pero a mí me pintaron esta película como una de las mejores de Pixar, una de las mejores casas, por no decir directamente que la mejor, en lo que animación respecta.

Hablé con una amiga sobre las diferentes películas que hicieron, empezando con Toy Story, y me explicó que todas ellas se pueden enfocar de distintas maneras, según la edad de la persona y supongo que también sus experiencias. Curiosamente he vivido las primeras animaciones como un niño y las últimas como un… ¿adulto? (broma absurda de las mías) Y me fastidia no poder verlas como un crío, pero también valoro verlas como alguien que ya las enfoca de otra forma. Ahora entiendo a lo que se refería mi amiga.

En esta película traté de analizar muchas cosas de las que estaban mostrándome y es que salí del cine reflexionando… Que una película para niños consiga eso tiene mérito y me encantaría explicaros porqué, pero es que eso sería contaros un poco la historia.

La composición de esta animación es brutal, la podéis enfocar de varias formas, le podéis sacar mucho jugo, tiene para todo y para todos; Riley (la niña) por un lado, las emociones por otro, cada una de ellas de manera individual, todas ellas en su conjunto, lo que sucede cuando se producen cambios en nuestras vidas, el caos que se genera y sus consecuencias… Hay mucha psicología detrás de todo esto.

Aunque se centran en las cinco emociones y en Riley, también aparecen otros personajes y cosas (sí, cosas, lo he dicho bien, cuando la veáis lo entenderéis) con gran importancia que, si te paras a pensar un poco, tienen funciones muy concretas que no solo son importantes en la trama de la película, sino en la vida real.

Ojalá os pudiera explicar más, pero si lo hiciera os destriparía la película, de verdad. Sé que es una entrada rara porque realmente no os cuento nada, pero es tan… Pixar.

#18 Frase de lunes

Llevo 18 semanas con esto… me paro a pensar y sinceramente no son pocas. Espero no fallar ningún día con las frases porque creo, y corregidme si me equivoco, que vienen bien para recordar que no todo está tan perdido como parece.

La que os traigo hoy os puede parecer surrealista, pero por mi experiencia no es así:

«Cuando deseas algo, todo el universo conspira para que realices tu deseo.» – Paulo Coelho

Desde el año en el que empecé a mover mi culo de la silla me empezaron a surgir cosas de todo tipo: la radio, las charlas, el blog, la tele, Youtube, la fundación (ya os contaré sobre esto en otra entrada). Y es curioso porque yo empecé a meterme en cursos y a ofrecer algo de mí y de ahí surgió todo lo demás; una llamada por aquí, otra por allá, mensajes, correos, etc.

Sí, me surgieron algunos problemas entre medias, eso es inevitable, pero caminé sin parar y todavía me surgen cosas que yo aún no me creo como por ejemplo ser aceptado en un taller al que me he inscrito y que se realizará en Madrid. Los me conocen ya saben que adoro la capital y tirarme allí una semana y pico va a ser la bomba para mí. Me servirá como experiencia porque nunca hice algo así. Además coincidirá con un evento de juegos al que iré allí.

Sinceramente, en base a lo que yo he vivido, si quieres seguir caminando y quieres llegar a tus objetivos, solo necesitas creer en ello, esforzarte y moverte. Esto último es algo que la frase no explica, pero yo sí, no penséis que todo se cumple por sí solo. Hay que poner el granito de arena o mejor, la gasolina para que el motor pueda arrancar y tire hacia adelante. Si lo hacéis e insistís, por muy difícil que parezca, lo conseguiréis tarde o temprano.

E insisto, los problemas vendrán solos, no se pueden evitar, pero también surgirán oportunidades que no os podíais ni imaginar y veréis como el objetivo se empezará a acercar a vosotros.

Vídeo: «Un día en Aqualandia»

Debería publicar otras entradas que tengo atrasadas, pero me hace ilusión hablaros sobre este vídeo. Se podría decir que es la segunda parte de la entrada que publiqué hace más de un año, «La pierna acuática«.

En esa entrada os hablo del par de (inserte aquí su opción) que tuve y acabar andando con mi pata acuática por todo Aqualandia. En esta ocasión os contaré que no tuve reparo en cambiarme de una pierna a otra, no me lo pensé dos veces como el año pasado, aprendí la lección y disfruté un montón.

Esta vez, al igual que la anterior, todos centraban sus ojos en mí llenos de curiosidad hasta que se dieron cuenta que era un payasete y hacía las mismas bromas y otras nuevas sobre la pierna. De nuevo la experiencia fue alucinante y a pesar de las primeras miradas de asombro, vale la pena porque al final con una sonrisa y mucha alegría llegas muy lejos, tanto que al final acabé haciéndome amigo de un socorrista. Hasta dos de ellos se «pelearon» por tirarse conmigo en una de las atracciones (al final nos tiramos los tres).

No dejé que el miedo me comiera como la primera vez, al revés, me lo desayuné y disfruté de verdad. Como ya he dicho otras veces, tenemos que afrontar esos miedos, esas situaciones que no nos atrevemos a superar o que nos dan pánico porque cuando sobrepasamos esa fina línea del «¿Lo hago o no lo hago?» y lo hacemos, terminamos por decir «Lo volvería a hacer»·

Tengo que admitir que esta vez tenía que tener unas pintas más raras que el año pasado; la pata acuática no está hecha con mucho detalle y terminé por perder la parte de abajo del pie. Al final resulté ser un pirata pata palo, ¡LITERALMENTE!

Creo que ya es hora de dejaros con el vídeo. Siento no salir prácticamente nada, cosas de ser el que graba la mayoría de los planos. Además no nos permitieron grabar con la Gopro tirándonos de las atracciones, de habernos dejado hubiera tenido más material. Aun así se agradece que os paséis a verlo y si os gusta, pues lo compartís, le dais a me gusta (la manita debajo del vídeo) y ya si eso os suscribís.

#17 Frase de lunes

Madre mía, me veo comiendo las uvas dentro de nada… que rápido se pasan los días. Ya sabéis lo que toca, hoy lunes, la frase de la semana:

«Nada muere más rápidamente que una idea en una mente cerrada.» – Pierre Bonnard

Dar rienda suelta a la imaginación y a nuestras opiniones siempre da oportunidades a conocer cosas que jamás hubiéramos pensado. No todo es blanco y negro, hay una escala de grises muy amplia, pero por desgracia no todos son capaces de verla. Hay quién a veces incluso solo ve un único color y ni uno más.

Creo que, a pesar de mi cabezonería y orgullo, siempre he tratado de ser flexible (dependiendo de la situación y el tema del que se está tratando, claro). Tengo mis opiniones, mis ideales, mi creatividad, mi imaginación… eso no me lo quita nadie, pero sí doy opción a que otras personas vengan y me corrijan algo o me aconsejen, es más, en algunas ocasiones he escuchado a otros y terminé por mejorar.

El hecho de mantener el ático bajo llave, solo significa que nadie podrá entrar, así que todo terminará por coger polvo, además de deteriorarse poco a poco con el tiempo puesto que nadie lo va a cuidar… Limpiar y renovar ese lugar cada cierto tiempo siempre vendrá bien.